martes, 4 de octubre de 2016

El SEO y la cocreta: las búsquedas semánticas y la ortografía en el Page Rank

Cómo posicionarse más allá de las keywords


Las características y prácticas del SEO moderno poco tienen hay que ver con el SEO de hace 20 años. El SEO se ha ido desarrollando y cambiando al ritmo que Google introducía nuevos algoritmos y reglas de posicionamiento. Además, el usuario también ha evolucionado y sus patrones de búsquedas han ido haciéndose más naturales a la vez que la tecnología le brinda nuevos canales (dispositivos móviles y búsquedas por voz, por ejemplo).

Ambas partes se retroalimentan ya que los buscadores añaden nuevos criterios y niveles de información adaptándose a las búsquedas y el usuario adecua sus formulaciones a la manera en que el buscador le devuelve los resultados. Asimismo el SEO off page ha ido imponiéndose al SEO on page de manera que han ido ganando peso variables desvinculadas de las keywords, intangibles en algunos casos.


SEO semántico
SEO semántico. Src: www.bigoakinc.com/big-oak-photos

En este marco de adaptación al usuario y a los nuevos canales, en el postgrado que estoy realizando de Inbound Marketing, y dentro del apartado dedicado al tráfico orgánico, me enseñan el concepto “mina de palabras clave”. Se trata de elaborar textos con las palabras clave que utilizan los usuarios para buscar en Google para que sean más fáciles de encontrar por nuestra audiencia. Las búsquedas que solían estar compuestas por palabras clave sueltas omitiendo stop words del estilo de “mejor restaurante Barcelona” pasan a ser búsquedas semánticas, más naturales, tipo “¿cuál es el restaurante mejor valorado en Barcelona?

Una de las cosas que me viene a la mente cuando pienso en el impacto que tiene en el SEO adaptarsea cómo buscan los usuarios es la ortografía. Según el precepto de trabajar el texto con arreglo a lo que busca el usuario, si mi madre quiere encontrar una receta para hacer croquetas y mi amigo tiene un blog de cocina, yo le recomendaré a mi amigo, utilizar “como hacer cocretas” en lugar de “cómo hacer croquetas”. Sé que es un ejemplo un tanto excesivo pero me hace reflexionar sobre si deben diseñarse estrategias de SEO justificadas en “lo que la gente busca”; me pregunto si, a pesar de atentar contra la gramática, puedo llevartráfico a mi página a través de una palabra mal escrita que posiciona bien.


Búsqueda semántica "cómo hacer croquetas"
Búsqueda semántica "cómo hacer croquetas". Src: Jonathan Pincas


He encontrado el vídeo en el que Matt Cutts de Google comenta que aunque la ortografía no se tiene en cuenta para posicionar, sí hay una correspondencia entre el ranking y los contenidos bien escritos. Las páginas con contenidos mal escritos suelen contar con menor autoridad y reputación. Sin embargo, me ha parecido entender que las faltas de ortografía no penalizan en el Page Rank. Supongo que las búsquedas predictivas, las sugerencias y la incorporación de inteligencia artificial en Google hacen su parte del trabajo para reconocer los contenidos de calidad.

Y, ¿qué pasa con el lenguaje derivado del uso de ciertas tecnología como sms, emails, mensajería instantánea o redes sociales? Las restricciones de espacio en algunos casos y las prisas o pereza en otros nos llevan a abusar de las abreviaciones y acrónimos, a omitir signos de puntuación y acentos, cometer faltas de ortografía,… ¿Qué impacto tiene este fenómeno en SEO?

Por otro lado, creo que en ocasiones hay personas a las que le resulta complicado replicar en el buscador lo que tiene en mente o que no saben cómo realizar una búsqueda. Asimismo no todo el mundo se expresa de igual modo. Así que cuanto más humanizado sea elSEO y más uso de sinónimos, variaciones y palabras clave de cola larga, mejor encajaremos en todos los patrones de búsqueda.

El SEO debe enfrentarse también a las búsquedas por voz. Aquí las keywords dejan de tener tanto protagonismo y lo relevante es qué tipo de consultas realiza el usuario para poder posicionar con las respuestas que se espera encontrar. En este caso, ¿qué algoritmos influyen más en este tipo de búsquedas?

Como veis, se me plantean muchos interrogantes que espero que vayan resolviéndose a través de mi aprendizaje sobre la materia.

Una última duda: ¿será capaz el modelo de aprendizaje automático de Google para imitar los patrones cerebrales de reconocer las conexiones neuronales de mi madre?

domingo, 25 de septiembre de 2016

Seomasterizando en el planeta rojo

En el sistema planetario google, Marte se basta y se sobra para posicionar


¿Se puede salir victorioso seomasterizando en el planeta rojo? ¿Se puede siquiera aspirar a asomar una de las laderas de Marte en las SERPS?

De entre las cuestiones físico-astrónomo-filosóficas a las que uno se enfrenta a lo largo de la vida, la de seomasterizar en el planeta rojo, que me ha venido inducida, es una de las más desafiantes.

Marte goza de un muy buen branding y de un storytelling potentísimo; la competencia lo tiene difícil para hacerle sombra. Someter al planeta rojo a los designios del SEO es una misión ardua si no imposible.

Y es que este astro encarnado ha estimulado desde tiempo el imaginario colectivo como el lugar de donde proceden los extraterrestres humanoides o como hogar alternativo para el ser humano tras la destrucción del planeta Tierra. Marte además, no solo dispara las conexiones límbicas en el ámbito de la ciencia ficción y la ufología sino que lo asociamos, en nuestra prosaica vida terrestre, al territorio de la extravagancia o de la demencia, depende. Quién no ha dicho u oído alguna vez “este tipo viene de marte” o “mi jefa es una marciana”, o “eso es una marcianada”?


Seomasterizando en el planeta rojo
Marte, el planeta rojo. Src: Eduardo Loxley

Si buscamos en la mitología romana, Marte era el dios de la guerra, hijo de Júpiter  y de Juno. Marte rankeaba de fábula pues era, junto con Júpiter, la deidad más adorada en Roma.

Desde un punto de vista astronómico, el planeta rojo ha sido siempre un elemento de estudio de gran interés. Marte es uno de los planetas más próximos a la Tierra, similar en su morfología al planeta azul y el siguiente objetivo tras llegar a la Luna. Un montón de misiones espaciales tienen como objeto este mundo rojo. Conocer su geología, origen, existencia de agua o vida, son cuestiones científicas que permitirán conocer mejor nuestro planeta y sentar las bases de la colonización del espacio.

Marte también dio nombre al segundo día de la semana, martes, y al tercer mes del año marzo. Así que en términos de link juice es toda una autoridad. La marca Marte es tan potente que posiciona como Dios, como planeta, como sinónimo de éxito en Hollywood, como recurso en literatura,… y ahora como protagonista de numerosos blogs de los estudiantes de IEBS tratando de sacar adelante su caso práctico con la palabra clave long tail “Seomasterizando en el planeta rojo”. Este es el reto inducido al que me refería al principio y, como parte del experimento SEO, enlazo al post de una compañera de edición que también trata de posicionar esta keyword. 

Por cierto, que todos los estudiantes de ediciones anteriores del Postgrado de Inbound Marketing de IEBS tuvieron que seomasterizar en Marte antes que yo lo que les otorga una ventaja competitiva en términos de peso SEO, como mínimos por antigüedad, difícil de igualar partiendo de cero.


Seomasterizar
SEO. Src: Josh MacDonald


Con arreglo a todo lo anteriormente expuesto, en este proceso de masterizar en Marte en el ámbito del SEO, entendiendo yo por seomasterizar el proceso final de acabado y ensamblaje de las diferentes técnicas que nos permiten entregar un artículo final que rankee en una buena posición, creo que lograr una buena visibilidad en los SERPS para la palabra clave “remasterizando en el planeta rojo”, y valiéndome únicamente de white SEO, no va a ser fácil.  Si atendemos, además de a las inventivas SEO tradicionales, a las tendencias actuales basadas en la evolución de los motores de búsqueda que se han vuelto más “inteligentes” y saben discriminar contenido de valor y relevante para la audiencia, creo que el reto es superior al de una misión de la NASA al planeta rojo.